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Mostrando entradas de noviembre, 2010

La luna está enamorada

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H oy estaba leyendo y apareció una pregunta que decía: ¿Qué prefieres: el sol o la luna? Sinceramente me gusta más el sol, ya que me gusta más el día; pero pensé: la luna y yo tenemos algo en común, o quizás mucho en común. ¿Qué sería de la luna sin el sol?. Si la luz que nos entrega, es gracias al sol; si todo lo que ella es, es gracias al sol. La luna sin sol no sería más que otro astro dando vueltas por el universo eternamente, sin ninguna ruta determinada, simplemente vagando por ahí y por acá esperando algún día aterrizar en un planeta desconocido y entonces allí, terminar todo. Él es mi sol, la luna y yo dependemos de nuestro sol para poder ser algo, para poder vernos, para poder brillar, para poder iluminar; nosotras sin nuestro sol no somos nada más que una roca, dura y fría como el hielo, sin ninguna belleza.
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Es imposible -dijo el orgullo. Es arriesgado -dijo la experiencia. No tiene sentido -dijo la razón. Inténtalo -susurró el corazón. . .

Are you fine?

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En todas partes y en todos lugares podemos escuchar la expresión de ''cortarse las venas'', tan solo con el acto de escuchar alguna canción romántica o al hacer mención a los ''emos'' -(tribu urbana del 2009)- comienza la gente a decir esta expresión. Me di el trabajo de conversar con mis amigas con respecto a esto; me di el trabajo lo digo, porque como tenemos teorías completamente distintas sobre el amor y el dolor, para mí es algo duro tolerar aquellas ideas erróneas a mi parecer; yo les pregunté ¿Por qué lo haces? Todas coincidían en algo: lo hacen porque es su forma de desahogarse. Ahora yo me pregunto ¿Desahogarse del dolor emocional provocándose uno físico? Pero bueno, lo dejo al criterio personal. Yo por más enamorada que estoy, por más dolor que he sentido, por más decepciones... jamás siquiera pensé en la idea de ''cortarme las venas''; o me muero o sigo viviendo, pero ¿para qué provocarme aún más dolor?. Lo encuentro una enferm

Cuando él llega no hay forma de evadirlo; pero si no llega, no hay forma de buscarlo

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Muchos creen que se enamoraron incontables veces en su vida, o sea quizás contables, pero las suficientes cómo para que recordarlas una por una fuese un dolor de cabeza. Casi toda la gente que conozco cree eso, cree que el amor verdadero siempre está ahí... Que uno incluso puede buscarlo si se le place. La gente llega a creer que el amor es sentir mariposas en el estómago, que es una aceleración del pulso cardíaco. Cree que ellos tienen unos ''requisitos'' y su amor verdadero debe cumplir con todos ellos, que mientras más exigentes sean, mejor será la persona y al ser esta persona mejor, habrá más amor y menos sufrimiento. Con el dolor de mi alma debo decirles: se engañan, engañan a su corazón; esta no es la forma correcta. Mientras más dolor haya, más verdadero es el amor. ¿Cuál es la forma correcta? me preguntaría cualquier persona. Pues la única forma de encontrarlo es no buscarlo, así de simple. Yo pude haber tenido mil y un requisitos, pude haber sido muy exigente